El Arte Macroesquemático se caracteriza por imágenes pintadas de alto contenido simbólico. Se utilizaron pinturas de color rojo oscuro de aspecto pastoso, con las que se reprodujeron figuras vegetales, animales y, especialmente, humanas, destacando los orantes.
Los orantes macroesquemáticos son antropomorfos con los brazos levantados en actitud de súplica y las manos abiertas con indicación de los dedos.