La Universidad Autónoma de Madrid ha acogido el Seminario Internacional sobre Museos y Autismo: Experiencias, en el que participa la Fundación CV MARQ con la exposición del programa que desarrolla para integrar en el Museo y en los Yacimientos propiedad de la Diputación de Alicante la visita de personas con autismo. La responsable de la Unidad de Didáctica y Accesibilidad de la Fundación, Gema Sala, ha participado en una mesa redonda con expertos de museos y centros culturales nacionales e internacionales en la que ha expuesto el trabajo que se desarrolla en el MARQ para la inclusión de personas con trastorno de espectro autista. 

Desde 2013 la Fundación CV MARQ programa actividades para personas con autismo en colaboración con ASPALI, Asociación Asperger Alicante-TEA. Un ejemplo de esta sinergia ha sido el programa Guía por 1 día en el MARQ, en el que, durante una jornada, personas con autismo ejercen de guías del Museo para sus familias y allegados.

Además, y con el objetivo de socializar durante la adolescencia de los jóvenes con autismo, la Fundación CV MARQ impulsa diversas iniciativas para acercar el museo, los yacimientos, la arqueología y la historia a jóvenes con autismo de entre 9 y 13 años, así desde noviembre y hasta el mes de julio próximo ha puesto en marcha el programa Empower Parents en el que participan seis jóvenes alicantinos con autismo y sus familias.

Este programa, que nace de una experiencia llevada a cabo en el Queens Museum de Nueva York, desarrolla e investiga modelos de intervención con personas con autismo, sirviéndose de nuestros museos y centros culturales como herramienta de inclusión formativa y socializadora. En este caso el MARQ, se convierte en un laboratorio en el que experimentar nuevas prácticas y recursos de accesibilidad que garanticen el disfrute y la visita autónoma a personas con autismo y sus familias.

Este programa consta de 8 sesiones vivenciales, cada sábado, en las que el equipo de educadores de didáctica de la Fundación MARQ y las familias, junto a las personas con autismo, trabajan para intentar humanizar procesos y transformar el museo en un espacio común en el que poder encontrarse, hablar, bailar y también disfrutar de la cultura, además de compartir experiencias y establecer vínculos entre ellas.