El Museo Arqueológico de Alicante ha finalizado la campaña estival de excavaciones en el yacimiento de la Cova de l’Or en Beniarrés, donde se han recuperado numerosos elementos de adorno en concha y hueso, así como distintas muestras de utillaje de sílex propias de los agricultores que habitaron el enclave en el VI milenio a.C.

 Un total de cuatro voluntarios procedentes de las universidades de Valencia, Alicante y Belfast han participado en este programa centrado, principalmente, en la criba de las terreras de las excavaciones antiguas. Los trabajos, dirigidos por los arqueólogos del MARQ Jorge Soler y Consuelo Roca de Togores, se han desarrollado durante la segunda quincena del mes de agosto.

  La Cova de l’Or es uno de los principales yacimientos del Neolítico en la Península Ibérica. Los estudios de la secuencia de materiales que ofrece la zona han revelado su ocupación por parte de los primeros agricultores y ganaderos que poblaron la fachada mediterránea peninsular durante el VI milenio a.C. Esta civilización fue la misma que pintó los motivos de Arte Macroesquemático del Pla de Petracos y que decoraba sus vasijas elaborando barrocos motivos a partir del borde de una concha de cardium.